La filosofía como adorno cultural
Ivana Costa:
"Diversas teorías de la educación podrán esgrimir motivos por los cuales consideran mejor no enseñar a los adolescentes –y nuevos votantes—a razonar correctamente, a distinguir entre razonamiento válido e inválido, a detectar falacias y vicios de la argumentación (temas de la lógica, una de las ramas de la filosofía). Pero el documento del ministerio de Educación porteño no lo hace; al contrario, machaca con la importancia de la “argumentación”. En él leemos que se espera que los estudiantes puedan “identificar y producir argumentaciones”, “expresar una valoración (estética) mediante argumentación”, “recuperar en la argumentación los conocimientos (musicales) adquiridos”, ofrecer “análisis y argumentación fundamentada” (sobre el patrimonio cultural), “asumir posturas críticas y reflexivas” incorporando “argumentaciones y fundamentaciones basadas en los aportes teóricos” (de la informática), “elaborar argumentaciones sobre temas y problemas relevantes” (en ciencias sociales), distinguir “la argumentación racional o emocional” (en publicidad), adquirir capacidad “de argumentación y debate” (en humanidades), y un largo etcétera. El misterio es cómo se supone que los jóvenes alcanzarán ese objetivo si se elimina la materia destinada a enseñarlo. Se me ocurren dos posibilidades: están pensando en un saber intuitivo, un don providencial o cierta luz divina. O están usando la filosofía como adorno cultural."
No hay comentarios:
Publicar un comentario